Si tenéis ganas de hacer una sesión de familia bonita, y buscáis un estado natural o tenéis algún evento o proyecto especial que queráis retratar, estaré encantada de hablar con vosotros.
Soy experta en fotografía familiar y creo fotografías de los momentos más especiales y tiernos de vuestras vidas de la manera más natural. Haciéndoos sentir cómodos y tranquilos, y sin olvidarme de cada detalle. Conmigo olvidaros de posar delante de la cámara.
En el momento de ser madre, me di cuenta de la importancia de inmortalizar esos recuerdos tan especiales, nuestros pequeños van creciendo y la mejor manera es inmortalizar los recuerdos con las fotografías.
Soy amante de mi trabajo, una persona muy transparente, natural y cercana, y es lo que encontraréis en mis fotografías. Me encanta inmortalizar los momentos más emotivos, captar cada emoción, cada lágrima, cada sonrisa, mirada, abrazo….. y todos los momentos emocionantes.
Estudié diseño gráfico. El arte y la creatividad siempre fueron mi fuerte, aunque paradójicamente, no puedo decir lo mismo de la fotografía.
Fue la asignatura con la que menos disfrutaba. Aún así, comencé a jugar, a trastear, incluso logré llevarme a casa el segundo premio de fotografía deportiva de Euskadi.
Mientras que mi motivación crecía a paso agigantados, a mis 20 años, la vida me dio el golpe más duro; perdí a mi padre.
Y precisamente en esos momentos más oscuros, la fotografía me dio luz.
Decidí estudiar y dedicarme a ello, a captar los momentos más emotivos de la gente, y así crecí como profesional y sobre todo como persona.
En las bodas, me encanta captar cada emoción, cada lágrima y todos esos momentos emocionantes. De echo, lloro como si fuese una invitada más, y ahí es donde creo que está la esencia, en empatizar con cada pareja, con cada historia.
A mediados del años 2015, abrí un estudio fotográfico. Soy fotógrafa de bodas, de familias, de vuestros momentos. Mi único objetivo es llegar a transmitir vuestros sentimientos, vuestras miradas y abrazos, vuestra felicidad.